viernes, 1 de junio de 2012

2. La celulosa y el problema dela deforestación:



2. La celulosa está formada por moléculas de glucosa abundantes en el reino vegetal. Sirve de materia prima y su principal demandante es la industria papelera.
La producción de celulosa lleva a serios problemas medioambientales. La empleada en la producción de papel de baja calidad (la prensa) conlleva al alto consumo energético y a la contribución del efecto invernadero. De todas formas, la mayor parte el papel exige una mayor calidad, lo que implica un tratamiento químico. Los métodos utilizados son perjudiciales para el medioambiente porque consume mucha agua que se contamina. El uso de catalizadores y nuevas técnicas ha reducido la contaminación.
Otro problema es la deforestación. Los bosques y las selvas además de ser sumideros de CO2 impiden la desertización y mantienen un buen nivel de humedad atmosférica y forman ecosistemas.


La naturaleza recoge millones de especies de animales y vegetales de nuestro planeta. La industria de la madera y la celulosa, la tala indiscriminada, y la práctica agrícola y ganadera convierten los suelos fértiles en yermos. La construcción de obras de ingeniería tiene un efecto negativo sobre la masa vegetal.
Existen graves consecuencias de la explotación forestal, como la destrucción de la selva tropical, que so sigue así el ecuador (auténtica vida en nuestro planeta) desaparecerá.
 2.1            Plantaciones forestales.
La industria de celulosa inhalan muchísima madera y algunas han sido acusadas de exportar los problemas medioambientales del tercer mundo. Las empresas se defienden poniendo como argumento que han compensado las talas con reforestaciones y plantaciones forestales.

Las plantaciones forestales no llegan a convertirse en sumideros de CO2 comparado a los bosques naturales. En los países del tercer mundo las plantaciones desplazan a los habitantes que se establecen en esta región y tienen que talar otras zonas para su agricultura y ganadería. Además el impacto medioambiental al ser monocultivos reduce la biodiversidad. El protocolo de Kioto tiene el objetivo de regular las plantaciones forestales.
Las empresas que producen celulosa abusan de plantaciones de rápido crecimiento como el eucalipto y el pino. El eucalipto ofrece una madera de alta calidad, pero su introducción en un ecosistema ajeno provoca alteraciones: las raíces crecen con rapidez quitándole a las demás especies vegetales la humedad que tienen y empobreciendo el suelo. Además segregan sustancias químicas perjudiciales para el crecimiento de las demás especies.



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